SUFRAGISTA. SALLY HEATHCOTE
Mary M. Talbot, Kate Charlesworth y
Bryan Talbot
Conocí esta obra gracias a El
huerto literario. Me “picó” la curiosidad, como suele decirse, porque nunca
había leído una novela gráfica como esta. De pequeña sí había leído a Tintín,
Astérix y Obélix, Lulú y algunos más. Pero esto es “de mayores”.
Tengo que confesar que no he
acabado de cogerle el gusto. No sé bien si por el contenido, por cómo está
hecha, por mí y mis circunstancias… Pero no la he disfrutado como me esperaba.
Quizá también sea por las altas expectativas que me había creado en torno a la novela.
Con esto no quiero decir que no me haya gustado o que sea “mala”. Al contrario,
creo que tiene mucho mérito contar una historia así y plasmarlo con imágenes.
Pasando ya al contenido, aunque
había oído historias de sufragistas, nunca me había propuesto investigar o leer
sobre el tema. Sí había visto la película de Sarah Gravon, pero mi conocimiento
casi queda reducido a esto y a lo que nos enseñaron en el instituto, que no fue
demasiado (tampoco lo que viene en el currículo de PR4 actualmente). Por ello,
me ha parecido muy interesante la vida de Sally Heathcote que, aunque no sea un
personaje real, bien podría haber sido la vida de muchas de ellas, de las que
lucharon por que la mujer pudiera votar. La historia de esta huérfana que pasa
por enormes vicisitudes, decepciones, maltratos, desengaños… a lo largo de su
vida es muy conmovedora. Me han “dolido” más las vidas de otros personajes como
Christabel o la señora Pankhurst que fueron capaces de lo peor con tal de
conseguir su objetivo, lo cual te hace plantearte si el fin justifica los
medios.
Me ha llamado mucho la atención
que Sally, nuestra protagonista, acabe sucumbiendo al príncipe azul. Y no lo
digo porque esté en contra (tampoco a favor), sino porque no me lo esperaba en
una novela con un mensaje transgresor en la época en la que ocurren los hechos.
Otro tema que me ha llamado mucho
la atención es en el momento en que estalla la I Guerra Mundial y se pide a
todos los hombres que luchen por su país. Entonces Arthur no parece preocupado
por el tema y debe escuchar los reproches de la gente. Me resulta curioso que
Arthur apoye la lucha por el voto femenino y mantenga su coherencia de
pensamiento al no apoyar a su gobierno en la guerra.
Para terminar, quisiera señalar
el final: me ha parecido demasiado brusco y, además, deja en el aire algún
tema, como todos esos años desde que Sally trabaja en el tranvía hasta que es
anciana y está en el hospital. ¿Qué ha pasado en todos esos años? Para colmo,
termina de manera muy brusca, o al menos a mí me lo ha parecido.
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