RESEÑA - DESIERTO DE METAL

 

DESIERTO DE METAL

AGRIMBAU Y BALDÓ

 

En la pasada Feria del Libro en mi pueblo un vendedor (creo que también era editor) me convenció para comprar este libro. Me dijo que aunaba la II Guerra Mundial con un mundo del estilo de la saga Divergente; todo ello en novela gráfica con unas imágenes alucinantes. Me convenció, o me dejé convencer, por eso de leer cosas nuevas que puedan atraer a mis alumnos, sobre todo, pensando en mi próxima tutoría de PR4 en la daremos la II Guerra Mundial. La verdad es que me pareció muy interesante.

Bien, casi se me había olvidado que tenía este libro pendiente de leer cuando lo cogí una mañana y me puse a leer. La verdad es que me lo leí en poco más de una hora pero me supo a poco. Es cierto que sale de fondo la II Guerra Mundial pero apenas se toca el tema. De hecho, el argumento se puede resumir con muy pocas palabras (apenas hay acción): un par de soldados nazis quieren huir cuando son encontrados por unos autómatas que los llevan a una ciudad llena de ellos: Axedra. En ella les hacen una visita guiada para que conozcan dónde están y su historia; historia que se remonta a la época de Alfonso X el Sabio, quien empezó a crear dicha ciudad. De repente sufren una pequeña invasión para ver sus fuerzas. Los autómatas responderá un poco más adelante a este ataque y, fruto de él, volverán a la época de Alfonso X el Sabio.

La verdad es que me parece más un libro descriptivo de este mundo inventado que una novela en el sentido literal de la palabra. Como género narrativo, me parece muy pobre: sí hay personajes, sí hay tiempo y espacio, sí hay un narrador y sí hay acción, aunque muy poca. Y ese es el problema: en un contexto como es el de una guerra que apenas haya un ataque que se resuelve en un par de páginas no es suficiente.

Además, si quiero que las lecturas ayuden a aprender lo que estudiamos en clase, con esta no van a aprender nada. Eso sí, como historia distópica, es maravillosa.

Creo que dejaré esta lectura como voluntaria por si a algún alumno le apetece leerla, pero no la veo como lectura obligatoria.